El pasado sábado disputé una de las pruebas del Circuito The Power MBA que organiza tustorneosdegolf.com y que se celebró en el campo Montealvar (antiguo Golf de Valdeluz).
El día comenzó con el campo helado, lo que obligó al retraso de la salida unos 15 minutos. Sin embargo, a medida que avanzaba la mañana, el sol empezó a calentar y a medio día se quedó una temperatura estupenda.
La salida del torneo fue a tiro y yo salía por el hoyo 9, por lo que tenía que cruzar el barranco en las salidas de mis dos primeros hoyos. Y no me fue nada mal teniendo en cuenta el pavor que le tengo a los obstáculos, ya sean de agua o barrancos como en este caso.
En el hoyo 9 (par 3) dejé la bola desde la salida en el antegreen, aunque muy lejos de la bandera y acabé el hoyo con un bogey. Y en el hoyo 10 (par 4), me fui con la salida un poco a la derecha de la calle, pero el segundo golpe fue de tiralíneas, directo a la bandera, de la que me quedé corto por un metro y medio. A punto estuve de embocar el birdie, pero el par era un gran resultado.
Parece que el haber pasado el barranco las dos veces sin problema y con buen resultado me relajó un tanto de más. Esto me hizo hacer una salida horrorosa en el hoyo 11 (par 5) y un segundo golpe incluso peor, que me condenaron a un triple-bogey, o lo que es lo mismo, la primera raya en mi tarjeta.
En el hoyo 12 (otro par 3) volví a la senda del gran resultado con otro par, el segundo, que conseguí gracias a un approach maravilloso con el que dejé la bola casi dada.
El día venía con altibajos y un segundo golpe al bunker que hay frente al green del hoyo 13, desde el que me costó dos golpes sacar la bola, hizo que terminase el hoyo con doble-bogey. Aunque no tan mal como en el hoyo 14 (par 5) en el que, después de estar luchando por mantener la bola dentro de los límites del campo, terminé cayendo por dos veces en el obstáculo de agua que hay delante del green y anotándome la segunda raya en mi tarjeta.
El hoyo 15 (par 3) se me da bien o mal por días. Y esta vez salió cara. Con una buena salida desde el tee, llegué al green. Para entonces los greenes se estaban poniendo rápidos y el segundo golpe, aunque pasó cerca del hoyo, se me fue unos dos metros y medio. Y desde ahí emboqué para conseguir el tercer par del día en siete hoyos disputados.
Los hoyos 16 y 17 fueron casi los únicos medio normales para mi nivel de juego, lo que significa llegar a green de tres golpes y dos putts para terminar el hoyo con bogey.
En el hoyo 18 (par 4) se vuelve a pasar el barranco y, de nuevo, lo hice con nota. Al centro de la calle y dejándome un approach de unos 65 metros. Desde ahí al green y con dos putts, conseguía mi cuarto y último par del día.
Volví a pasar el barranco en el hoyo 1 (par 5) y de nuevo parece que me relajé al saber que había pasado el barranco en las cuatro ocasiones que hay que pasarlo y dejar atrás ese obstáculo, porque necesité cinco golpes para alcanzar el green y tres más para acabar el hoyo, lo que me supuso la tercera raya del día en mi tarjeta.
Lo que había sido irregularidad en los diez primeros hoyos alternando pares con malos o regulares resultados, de repente se convirtió en regularidad pero de resultados regulares o malos.
Así conseguí un único punto en el hoyo 2 (par 3) con un doble-bogey y la cuarta raya del día en mi tarjeta en el hoyo 3 (par 4) tras tirar dos bolas al agua.
Acabé los últimos cinco hoyos con tres bogeys y dos doble-bogey, y con bastantes malas sensaciones, especialmente desde el tee de salida donde la mayor parte de los golpes se me empezaron a ir directos a la izquierda.
Al final fueron 31 puntos stableford, habiendo conseguido 17 en mis primeros nueve hoyos jugados (del 9 al 17) por tan solo 14 en los nueve segundos (del 18 al 8).
A pesar del mal resultado, debido al actual sistema de cálculo del hándicap, en esta ocasión no he tenido subida de hándicap, por lo que me mantengo en 20,7.