El pasado viernes jugué el torneo «Casual Fridays» que se disputó en Golf Valdeluz.
La salida fue a tiro a las 13:30h y yo salía por el hoyo 1 bis. El día estuvo nublado con una ligera amenaza de lluvia, que no se concretó y sin una pizca de viento. Hacía algo de fresco, pero el mayor problema lo íbamos a tener con la luz, puesto que cuando estábamos en el último hoyo apenas se veía nada.
El campo, como es normal en esta época, estaba duro, aunque las calles y los greenes estaban en perfectas condiciones.
Personalmente que el campo esté duro me beneficia pues la distancia que consigo es mucho mayor. Sirva de ejemplo el primer golpe que di desde el tee de salida el hoyo 1 (par 5). Cuando llegué a la bola, el reloj decía que había recorrido 220 metros desde el punto donde realicé el swing. Fue la mayor distancia que hice en todo el torneo, aunque me fijé que sobrepasé los 200 metros con bastante regularidad, e incluso llegué a conseguirlos con la madera 3 en algún golpe.
Además de la gran salida en ese primer hoyo, el segundo golpe también fue muy largo, aunque escorado a la derecha. Apenas me quedaban unos 40 metros para el centro del green, pero el hecho de tener que tripatear, me hizo acabar el hoyo con bogey.
El primer par del día llegó pronto. En el hoyo 2 (par 3).
Un bogey en el hoyo 3 y un doble-bogey en el 4 (con un tercer golpe de 200 metros con la madera 3) me condujeron al segundo par del día en el hoyo 5 (par 4). La bandera estaba larga, pero con un buen chip me dejé un putt de 1,20 metros para par, que no desaproveché. Posteriormente confirmé que fue el único hoyo que acabé con un solo putt.
En el hoyo 6 (par 4 y hándicap 1 del campo) tuve mala suerte en la salida pues la bola se me fue contra una encina que hay a la izquierda de la calle, lo que me restó muchos metros y además me impedía tirar a green directamente. Aun así, el segundo golpe fue muy bueno por abajo y me dejé un tiro de menos de 80 metros para el green. Pero un socket tiró por los suelos la opción de conseguir un buen resultado. Al final fue un doble-bogey y gracias a que emboqué un difícil segundo putt.
El hoyo 7 fue un claro ejemplo de la irregularidad que tuve con el putt. Después de alcanzar el green de dos golpes hice un primer putt horroroso. Sin embargo emboqué para par con un segundo putt que no era nada sencillo. Y así fui durante todo el torneo con un putt bueno de cada dos. Con el primer putt, o hacía magia y dejaba la bola dada (pero sin meterla), o daba un golpe horrible con el que me dejaba mucho trabajo para el segundo putt, en cuyo caso, daba un gran golpe para embocar.
Con un bogey y un doble-bogey acabé la primera vuelta y un resultado parcial de 21 puntos stableford.
En el hoyo 10 y sobre todo en el hoyo 11 tuve un golpe malísimo en cada uno de ellos. El del hoyo 11 fue en la salida, ya que mandé la bola al rough del hoyo 17, pero el que se encuentra pasada la calle del 17. Aún así, con un gran segundo golpe conseguí salvar el problema y terminé con un bogey, que no fue par por centímetros.
En el hoyo 12 (par 3 largo) perdí la primera y única bola del día, al llevármela completamente hacia la izquierda, lo que hizo que irremediablemente cayese en el obstáculo de agua.
En el hoyo 13 conseguí el primer par de la segunda vuelta y esta vez sí que se me escapó el birdie por un par de dedos. Pena de punto que se fue al limbo.
Y en el 15 (par 3), después de dejarme una oportunidad bastante real de birdie, un malísimo primer putt hizo que casi tampoco consiguiese el par.
Dos doble-bogeys en los hoyos 16 y 17, me permitieron llegar al hoyo 18 (par 4 en el que se cruza de nuevo el barranco) con 36 puntos stableford.
Entre tinieblas y sin apenas ver nada, mis compañeros de partido me indicaron la dirección que había tomado mi bola en la salida y la encontré a la derecha de la calle a unos 75 metros de la bandera. Con un appoach y dos putts me apunté el sexto par del día y un resultado final de 39 puntos stableford.
Con esta nueva bajada de hándicap, por fin rompo la barrera del hándicap 20 y me coloco en 19,6.
Por curiosidad he revisado la evolución de mi hándicap y he comprobado que en julio de este año estaba en 24,2, es decir, en menos de seis meses he conseguido bajar 4,6 puntos.
El próximo torneo que jugaré será seguramente el Torneo de Navidad de Independientes que se disputará el 23 de diciembre en el Centro Nacional de Golf.